En total la factura, con vencimiento al 8 de agosto, es de $3.540.632.164,23, mientras que la factura de marzo fue de $700.039.137,82. Esa diferencia sustancial, en general, un aumento de 405% en un lapso de 5 meses.
A partir de junio la Secretaría de Energía aprobó de nuevo un aumento de energía a través de la Resolución 92/2024, con lo cual, hay un incremento del precio total de la energía para las categorías de altos, medianos y bajos ingresos.
También se dispuso la aplicación de topes a los volúmenes de consumo subsidiados en todas las categorías residenciales, lo que afecta directamente al valor de la factura de los usuarios. Para los segmentos N3 de ingresos medios, se redujo el tope de consumo de 400 kW.h a 250 kW.h y para los usuarios del segmento N2 de ingresos bajos, que tenían todo su consumo subsidiado, se estableció un tope de 350 kW.h. Asimismo, para los usuarios que no poseen red de gas, el tope de consumo se estableció en 500 kW.h para el segmento N3 y en 700kW.h para los usuarios del segmento N2.
De este modo, las cantidades consumidas en exceso, por fuera de estos topes de consumo subsidiados, deberán ser abonadas al precio pleno de energía eléctrica mayorista, establecido por la Secretaría de Energía, lo que ya comienza a verse reflejado como una reducción importante del subsidio del Estado Nacional en la factura.
Cabe destacar que las categorías N2 y N3 representar el 60% de los usuarios residenciales.
Esto complejiza aún más el pago del 100% de la factura a CAMMESA, sin que esto tenga un impacto en la tarifa del usuario, ya que se esperan facturas para los meses de septiembre y octubre de más de 4 mil millones de pesos.
Por último, lo que preocupa a las autoridades de la institución es que la Secretaría de Energía estableció este precio hasta octubre, reconociendo que ya hoy se encuentra un 25% por debajo de lo que necesitan los generadores. Si a esto le sumamos la progresiva quita de subsidios establecidas por el Gobierno Nacional en el periodo de transición, la facturación de CAMMESA podría incrementarse en un 40%, lo cual complejizaría aún más la situación frente al pago corriente. “Venimos realizando pagos parciales desde mayo, y aunque mejoramos nuestra situación frente a CAMMESA, el monto cada vez es mayor y se vuelve difícil cubrir la totalidad del costo de la factura”, expresaron desde la gerencia general.
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