Con el telón de fondo del Hotel Rayentray en la pintoresca ciudad de Puerto Madryn, se dio inicio al segundo "Encuentro de Gobernadores de la Región Patagónica". Encabezados por el anfitrión, el gobernador de Chubut, Ignacio "Nacho" Torres, los seis mandatarios regionales se reunieron para abordar una agenda de desarrollo común que promete marcar un hito en las relaciones entre las provincias y el gobierno central.
Desde las primeras horas de la mañana, los gobernadores de La Pampa, Neuquén, Río Negro, Santa Cruz y Tierra del Fuego se sumaron a Torres para discutir temas cruciales como la coparticipación, la transición energética y la promoción del hidrógeno verde, así como el impulso del valor agregado en la producción provincial.
El punto central de las deliberaciones gira en torno al reparto de fondos, una cuestión que ha generado tensiones entre las provincias y el gobierno nacional, especialmente tras la controvertida decisión del presidente Javier Milei y su ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo, de reducir los fondos a las provincias, exacerbando las dificultades económicas y financieras de muchas de ellas.
En un gesto de unidad sin precedentes, los gobernadores patagónicos han logrado el respaldo de sus pares de otras regiones para impulsar un proyecto de ley que reforme la actual Ley de Coparticipación de Recursos Fiscales, garantizando ingresos equitativos para todas las provincias sin depender de negociaciones con el gobierno central.
Con la posible presentación del proyecto este mismo día, se abrirá un proceso parlamentario que comenzará en el Senado y se espera una aprobación casi segura, seguida de una confirmación en la Cámara de Diputados, donde los gobernadores confían en obtener una mayoría para su aprobación.
Sin embargo, se anticipa una posible tensión con el Poder Ejecutivo, ya que se espera un veto presidencial. Para superar este obstáculo, se requerirá el respaldo de dos tercios de la Cámara de Diputados, un desafío que los gobernadores están dispuestos a enfrentar en aras de fortalecer la autonomía provincial.
El objetivo final de los gobernadores es establecer un nuevo paradigma en las relaciones entre las provincias y el gobierno central, sin menoscabar la institucionalidad ni promover posturas separatistas. Este encuentro marca un hito significativo en la historia política de la región y promete redefinir el equilibrio de poder en el país.
La jornada de trabajo continuará con la discusión de la creación de una agencia de desarrollo patagónico, políticas de fomento a la inversión privada y la planificación de obras públicas postergadas. Se espera que los resultados de estas deliberaciones sean anunciados en una conferencia de prensa al final del día, donde los gobernadores compartirán sus visiones y objetivos con los medios presentes.
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