El reclamo de Justicia por Gonzalo se trasladó hacia el Juzgado de Familia

Este viernes, familiares, amigos y la comunidad volvió a volcarse a las calles para reclamar Justicia por el crimen de Gonzalo Guenchur. En esta oportunidad, la concentración fue en la plaza de la Escuela N° 83 para luego continuar por las calles céntricas y trasladarse al frente del Juzgado de Familia, teniendo en cuenta que el menor de 15 años sindicado como el autor del homicidio en ocasión de robo del estudiante de la Escuela N° 711, quedó a disposición de este organismo.

En el lugar se vivieron momentos de emoción, de angustia y enojo, también se dio cierta tensión y un breve "encontronazo" con la policía que custodiaba fuertemente el edificio judicial, debido a que querían evitar que los jóvenes presentes en la manifestación pegaran carteles alusivos a sus reclamos.

La mamá de Gonzalo, Noelia Alderete, expuso "cada uno expresa el dolor de diferentes maneras, pero yo pido como la mamá de Gonza, a mi hijo no le gustaba el bardo era muy respetuoso, y yo le decía cuando veas que algo es injusto buscá la forma de solucionarlo de buena manera, para eso están las leyes, yo vengo hoy acá porque desde fiscalía quieren cerrar el tema, ellos ya encontraron al culpable, me dieron nombre y apellido, ya cumplimos, si salgo con esa postura se va a armar un quilombo bárbaro".

Además, indicó "yo no quiero eso, yo quiero que esta fuerza que podemos reunir entre todos, esta garra, esto que nos moviliza desde adentro podamos aplicarlo bien. Es un menor el supuesto responsable, si es menor tiene que responsabilizarse el Juzgado de Familia, acá tenemos que reclamar ahora, si el Juzgado decide velar por los derechos de esta persona que cometió un homicidio pueden derivarlo a la Casa del Niño, al psicólogo y ocuparse de su vulnerabilidad como jovencito, entiendo esa parte pero también entiendo que cometió un crimen, un homicidio que fue premeditado, calculado, fue con dolo porque él salió a la calle sabiendo lo que iba a hacer porque anduvo dos horas rondando en la zona hasta que vio a mi hijo".

Entre lágrimas, recalcó "vi la cinta, tenía mucha bronca cuando pensé que mi hijo salió corriendo atrás de él por un celular, yo le decía que Gonzalo si te quieren robar entregá todo, no vale la pena, eso no vale la vida, algo material, entiendo la reacción de mi hijo, se sentó minutos al lado de mi hijo, pregunto a varios donde podía llegar a un barrio, porque miramos con desprecio que es un pibito, que no merece ni el saludo. Mi hijo se sentó con él a explicarle, le indicó con los brazos, estuvo varios minutos. Fue durísimo ver como le arrebataron el celular por ese buen corazón que yo le enseñe tener".