Por Marina Aguila
Angie Cossio y su compañera Haydee realizan una labor incansable, buscando, rescatando y rehabilitando perros abandonados para brindarles una segunda oportunidad a través del tránsito y la puesta en adopción. Sin embargo, se enfrentan a un panorama desolador: cada vez es más común ver cachorros abandonados en cajas, en lugares desolados y maltratados.
La falta de conciencia sobre la esterilización y el abandono irresponsable contribuye a esta situación desafiante. “Tengo en estos momentos en casa 30 animales, algunos a cargo mío y otros son transitados que quedaron acá” dijo y agregó que “me gustaría que la gente tome conciencia sobre la importancia de la castración”, dijo a El Ciudadano del Sur.
Continuó diciendo que “todo callejero que se cruza por mis ojos, si puedo, lo levanto, me lo traigo a casa y lo castro, esperando a que aparezca el dueño, si no aparece lo devuelvo al mismo lugar donde lo encontré porque no puedo seguir acumulando mas perros”.
Angie, es pensionada y es tanto el tiempo que le dedica a esta causa que hasta por momentos “no tengo vida social, de tanta cantidad de perros que tengo para atender”, indicó. En este sentido, se refirió a que el cuidado de los animales no solo abarca la comida, sino también la limpieza del patio o lugar en el que estén, las vacunas y la desparasitación lo que supone un costo significativo.
“Antes mi segunda casa era el tráiler de castración. Yo me la pasaba de lunes a viernes castrando llevando a perras a castrar, a montones llevaba, con dueño o sin dueño, de gente de bajos recursos que no tenía movilidad. Eso lo hice durante muchos años, ahora lo hago más pausado porque ya mi edad no me lo permite”, dijo.
A pesar de las limitaciones, Angie y Haydee continúan respondiendo a llamados de ayuda, rescatando perros abandonados. “A veces pasa que vamos al lugar, sacamos fotos de los animales abandonados y publicamos en redes, porque no podemos traernos un animal más a casa”.
Asimismo, en caso de encontrarse con animales que necesitan servicio médico, facilitan la asistencia veterinaria con la ayuda de profesionales comprometidos. “Trabajamos con veterinaria Roca, con el Dr. Ferro y la Dra. Natalia Flandes y también con veterinaria Freija, con el Dr. Jesús Luque, que son los que nos ayudan con nuestros rescatados” dijo Angie.
Explicó el procedimiento: “Yo tengo cuentas, como una cuenta corriente en las veterinarias y si me sale un caso, de algún perro o gato que está herido o enfermo, yo lo llevo a cualquiera de esas dos veterinarias, me lo atienden, me lo anotan en la cuenta y yo pido colaboración, generalmente haciendo rifas, entonces la gente me ayuda a saldar las deudas” dijo y agregó que por lo general son casos de animales atropellados o atacados por otros perros.
Además de su labor como rescatista, Angie junto a su compañera, se involucran activamente en la concientización pública, impartiendo charlas en escuelas para promover el cuidado responsable de los animales. Ella enfatiza que incluso las acciones más pequeñas, como llevar a un perro callejero a esterilizar u ofrecer tránsito, pueden marcar una diferencia significativa en la lucha contra la superpoblación canina y el abandono.
A pesar de los desafíos y sacrificios, Angie encuentra satisfacción en el proceso de transformación de los animales rescatados. “Yo me dedico a esto de lleno y lo hago con mucho entusiasmo y con mucho amor”.
Jornada de adopción en la Plaza de Las Naciones
Angie junto a María Huenchuman, han estado organizando jornadas de adopción en la Plaza de Las Naciones o también conocida como “plaza de las torres”. "Es importante que la gente adopte y no compre", dijo Angie.
Estas jornadas no son sólo eventos de adopción, sino procesos cuidadosos para asegurar el bienestar de los animales. Angie explicó que "verificamos el domicilio, que la gente tenga para solventar los gastos del perro, de las vacunas y que no alquilen", dijo señalando que han tenido experiencias pasadas, donde algunos perros fueron devueltos debido a problemas de vivienda.
“Trato de buscar un buen adoptante y siempre trato de buscar lo mejor, porque se merecen tener buena vida los animales”, dijo aunque encontrar hogares para perros más adultos o de mayor tamaño es un desafío. Lamentó que "los perros más adultos o más grandes son más difíciles de adoptar". A pesar de su amor y cuidado, muchos de estos perros han pasado años esperando un hogar permanente.
Angie enfatizó en la importancia de concientizar sobre la adopción responsable, independientemente del tamaño o la edad del perro. "Es necesario concientizar en que un perro sea grande o chico, necesita ser adoptado", insistió.
Además de la adopción, en estas jornadas reciben donaciones de alimentos o comida de forrajería como arroz o polenta y otros suministros esenciales para el cuidado de los animales en tránsito. “Generalmente pongo de mi bolsillo y la verdad es que está todo cuesta arriba, todo muy caro. Entonces toda ayuda en alimentos es bienvenida, como así también donaciones de camitas o mantas para el invierno, etc.”
La próxima jornada, si el clima acompaña, será este martes 30 de abril en la misma plaza a partir de las 14:30. Quienes deseen colaborar pueden contactar a Angie al 297 625 0391.
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