El ex presidente Donald J. Trump se encontraba en un mitin en Butler, Pensilvania, cuando varios ruidos que sonaron como disparos lo llevaron a ser evacuado de urgencia por el Servicio Secreto.

Trump estaba en el escenario cuando los ruidos comenzaron. De inmediato, los agentes del Servicio Secreto lo rodearon y lo escoltaron fuera del lugar. Mientras se retiraba, el ex presidente levantó el puño en señal de desafío ante la multitud.

El incidente ocurrió a las 6:13 p.m., momento en el cual Trump parecía tocarse la oreja derecha, que mostraba signos de estar sangrando mientras abandonaba el escenario.

Pese a la confusión y el peligro aparente, Trump mantuvo una actitud desafiante, gesticulando hacia sus seguidores mientras era conducido a su vehículo. La rapidez de la respuesta del Servicio Secreto fue crucial para asegurar la seguridad del ex presidente.

Este incidente ocurre en un contexto de creciente retórica y ataques políticos de Trump hacia la vicepresidenta Kamala Harris, a quien ha criticado con más frecuencia tras el reciente debate presidencial.