El Gobierno Nacional, que dirige Javier Milei, oficializó a través del Boletín Oficial el cierre definitivo de Télam como Sociedad del Estado. A partir de ahora la agencia de noticias de la República Argentina fundada en 1945 dejará de existir como se conocía hasta el momento y se transformará en una sociedad anónima que mantendrá su rol de administrador de la publicidad estatal pero no brindará servicios periodísticos.
Esta decisión ha sido oficializada con la publicación del decreto N° 548, en dónde se ordena la conversión de la empresa pública. Según detallaron "dejará de operar, tal como ha sido creada originalmente, en las actividades de servicios periodísticos y como Agencia de Noticias, justificándose las modificaciones de su objeto social en la necesidad de alinear sus operaciones con un nuevo enfoque estratégico de la sociedad para operar como Agencia de Publicidad y Propaganda".
Además, se instruye al interventor Diego Chaher para que "adopte los recaudos necesarios" con el fin de transferir "a medios públicos y/o a terceros, dentro de la órbita que se determine, los servicios periodísticos y de Agencia de Noticias, el personal, los bienes muebles e inmuebles, marcas, registros, patentes y demás bienes inmateriales y todos aquellos bienes que a la fecha de dictado del presente se encontraren afectados al uso de los servicios periodísticos y de Agencia de Noticias, cuya titularidad detentara la referida Telam Sociedad del Estado".
Días atrás, el vocero presidencial, Manuel Adorni, había manifestado que "el plan sigue siendo exactamente el mismo: el de Télam efectivamente su cierre y el de los medios públicos dependemos de la decisión que tenga el Congreso con respecto a ello. Pero como digo siempre, nuestra decisión es que todas las empresas públicas transiten el camino de la privatización", agregó el funcionario.
Ya desde el mes de marzo, por decisión del Poder Ejecutivo, Télam había dejado de brindar información y servicios periodísticos, desde entonces el Gobierno Nacional dispuso extender la dispensa laboral para el personal, abrió un programa de retiros voluntarios para todos los empleados y avanzó con el cierre de todas las corresponsalías que funcionaban a lo largo y ancho del país con el fin de generar información federal.